Carta al chico que sonríe

Hola, quería decirte algo, es acerca de como me siento, trataré de ser breve, aunque si no lo es, discúlpame llevo mucho tiempo queriéndotelo decir. Eres una persona casi como cualquier otra, pero, tú siempre sonríes, con amabilidad, con ternura, con confianza, estoy tan acostumbrada a verte sonreír que el día que no lo hiciste, tampoco quise hacerlo, no se por lo que pasaste para dejar de hacerlo, quizás te peleaste con tus padres, quizás te enojaste con tu hermana o tu hermano, quizás se murió tu perro o gato o tu mascota preferida, quizás no amaneció el clima como tu querías, quizás peleaste con tu novia o quizás tuviste una pelea con tu mejor amigo, no sé. 

Gracias a ti el chico que sonríe con sinceridad, porque me has enseñado responder de una manera amable, jamas pensé en la importancia de ello, hasta que tu me diste el ejemplo de ser amable.  Se que no importa que absurda sean las cosas que digo aun así no te enojas, aun así respondes con amabilidad  y una enorme sonrisa en tu cara.

Esta carta es especialmente hecha para ti, ese chico que no se da por vencido, gracias a ti quién siempre tienes preparada una sonrisa en tu rostro, se que no es para mi, pero, aun así gracias de veras. A ti que siempre ayudas, quien animas con tu ejemplo, por ser tan genial y tener tu sonrisa tan amplia que llega hasta alguien tan simple como yo.

Gracias por alegrarme la vida con un acto tan simple, tan sencillo, pero tan efectivo el de curvar tu boca, por tener esa vibra tan única y especial que hace que todos a tu alrededor se contagien, gracias, infinitamente gracias. Y por favor sigue sonriendo.